En las últimas semanas, las autoridades de la Asociación Argentina de Tenis venían manteniendo reuniones con las autoridades administrativas y sanitarias con el fin de poder reanudar la actividad con protocolos en el ámbito de la Ciudad y el Gran Buenos Aires, en el contexto de la pandemia de coronavirus. Sin embargo, el “congelamiento” de las condiciones de aislamiento actuales hasta mediados de agosto cambió los planes y a los dirigentes del deporte les cayó como un balde de agua fría. Así lo evidenció la AAT con un comunicado y su presidente Agustín Calleri con unas fuertes declaraciones.

Tal como hemos informado en las últimas semanas, las máximas autoridades de nuestra institución, el Presidente Agustín Calleri y el Vicepresidente Mariano Zabaleta, mantuvieron reuniones presenciales y virtuales con diferentes actores del arco político, especialmente de la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia de Buenos Aires.

En el caso de la capital del país, todo estaba encaminado hacia un regreso a la práctica de tenis en los primeros días de agosto, después de una positiva reunión con el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y su Vice Diego Santilli. En aquella oportunidad se analizaron la situación sanitaria de CABA y el Protocolo de la AAT, y finalmente se establecieron pautas claras para el regreso. Pero la decisión de postergar el paso a la etapa 2 -al menos- hasta el 16 de agosto demora otras dos semanas el retorno a las canchas.

Es imposible disimular el malestar que nos genera esta decisión, máxime si se tiene en cuenta que fue anunciada en la misma semana en que la Ciudad de Buenos Aires reabrió peluquerías, salones de estética, lavaderos de autos, galerías y paseos comerciales, rubros que, en todos los casos, imponen un distanciamiento social menor y condiciones generales mucho más riesgosas que la práctica del tenis al aire libre.

Del mismo modo, promediando la semana tuvimos la oportunidad de escuchar las declaraciones del ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán, a partir de las cuales quedó en evidencia un profundo desconocimiento de la naturaleza de nuestra actividad y, al mismo tiempo, de las particularidades de nuestro Protocolo, presentado el 25 de abril pasado ante el ministro de Deportes de la Nación, Matías Lammens, y aprobado oportunamente por el Ministerio de Salud de la Nación.

Es por esto que, ante los reiterados pedidos para que nos permitieran volver a la actividad, bajo condiciones seguras y cuidados estrictos -como siempre garantizamos-, y después de las reuniones periódicas que mantuvimos con autoridades de todos los espacios políticos y de todas las especialidades, exigimos que se reconsidere en el AMBA la situación del tenis, un deporte del que viven miles de familias y que se puede practicar de forma segura, como ya quedó demostrado en 20 provincias del país”.

Calleri, por su parte, lamentó la decisión en un video para C5N porque “miles de familias viven de nuestro deporte. Los profesores necesitan volver a trabajar, los clubes necesitan abrir sus puertas y la industria del tenis ponerse en marcha cuanto antes”. Además, comparó lo que sucede en el área metropolitana con experiencias exitosas en el Interior: “En la Argentina tenemos 20 provincias que pueden dar fe de que practicar tenis con los cuidados necesarios no es algo peligroso”. Y volvió a apuntar a Gollán: “No entendemos las declaraciones del ministro, interpretando que nuestra actividad es riesgosa. Eso genera confusión y bronca. Hacemos un llamado a todas las autoridades para que revean su postura y entiendan que el tenis es un rubro que necesita reactivarse y es mucho más seguro que otros que abrieron en los últimos días”.

Fuente: TyC Sports